Diccionario de Psicología
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Materia
Consulta e Investigación
Descripción
Este diccionario asume como su ámbito temático tres estructuras disciplinarias: a] la psicología propiamente dicha, ilustrada en sus expresiones teóricas y, hasta donde me ha sido posible, en todas sus técnicas y características operativas; b] la psicología de lo profundo que, a partir del psicoanálisis, recorre todas las orientaciones que de éste se desarrollaron en sucesión histórica o que se constituyeron en divergencia teórica, dando origen a diferentes
tendencias; c] la psiquiatría que, pese a ser una “-iatría”, y por lo tanto una técnica terapéutica, subyace a una “-logía”, es decir a una concepción de lo psíquico que condiciona y distingue, en ocasiones en forma muy radical, la calidad de la intervención médica. Estos tres ámbitos disciplinarios, cuya influenciarecíproca produjo numerosas contaminaciones teóricas y frecuentes complicidades lingüísticas, han sido convocados en su oportunidad en cada una de las voces que los citan para permitir al lector recorrer las variaciones de significado, y
en algunos casos incluso el cambio de sentido, que la misma palabra asume al pasar por los diferentes campos del saber psicológico.
Ya que el mundo de la psicología no está cerrado, sino se comunica con mundos contiguos, fue necesario dar cuenta de los antecedentes teóricos que están en la base de los modelos conceptuales implícitos en la psicología y los aparatos culturales, además de los instrumentos operativos procedentes de otras disciplinas y que la investigación psicológica modificó y relaboró para sus finalidades específicas. De hecho quise que en este diccionario la psicología
no expusiera sólo la belleza de sus ramas sino también la profundidad de sus raíces, que se hunden en el terreno de la filosofía del cual nació la psicología y de donde con frecuencia todavía incluso, sin saberlo, continúa nutriéndose, para extenderse hacia las disciplinas afines que son la epistemología, por lo que se refiere a la justificación de los asuntos teóricos mismos; la fenomenología, por la modalidad de conducir la observación más allá de la división entre alma y cuerpo; la antropología cultural, por los modelos de investigación que ésta elaboró y transformó a partir de la psicología; la sociología, que tiene numerosas zonas limítrofes y continuos intercambios de informaciones teóricas y experimentales con la psicología; la pedagogía, a la que la psicología ofrece modelos interpretativos esenciales y de la que recibe respuestas significativas de acuerdo con la comprobación empírica; la lingüística, porque el lenguaje es el horizonte donde la psique se expresa, se narra, rinde cuentas; la hermenéutica, porque la palabra no existe más que en la huella de la interpretación histórico-cultural, de la cual la psicología no está aislada.
Junto a las ciencias humanas, las ciencias biológicas son para la psicología términos de referencia esenciales, como en el caso de la genética, cuyos rápidos desarrollos determinaron, si no el desplome, seguramente sí la sacudida de numerosas hipótesis culturales; la endocrinología, cuyos descubrimientos, lejos de haberse agotado, no dejan de desplazar el eje de referencia de la descripción psicológica del plano de la hipótesis interpretativa al de la comprobación experimental; la neurofisiología, hoy enriquecida por las importantes contribuciones provenientes de la clínica psiquiátrica, la farmacología, la neurocirugía e incluso la etología, que recientemente se emancipó de la psicología animal genérica. Por último, no faltan las contribuciones provenientes de la estadística, la cibernética y el estudio de los tests, que permiten traducir datos iniciales en datos elaborados y disponibles para hipótesis teóricas sostenidas con la confirmación experimental.
tendencias; c] la psiquiatría que, pese a ser una “-iatría”, y por lo tanto una técnica terapéutica, subyace a una “-logía”, es decir a una concepción de lo psíquico que condiciona y distingue, en ocasiones en forma muy radical, la calidad de la intervención médica. Estos tres ámbitos disciplinarios, cuya influenciarecíproca produjo numerosas contaminaciones teóricas y frecuentes complicidades lingüísticas, han sido convocados en su oportunidad en cada una de las voces que los citan para permitir al lector recorrer las variaciones de significado, y
en algunos casos incluso el cambio de sentido, que la misma palabra asume al pasar por los diferentes campos del saber psicológico.
Ya que el mundo de la psicología no está cerrado, sino se comunica con mundos contiguos, fue necesario dar cuenta de los antecedentes teóricos que están en la base de los modelos conceptuales implícitos en la psicología y los aparatos culturales, además de los instrumentos operativos procedentes de otras disciplinas y que la investigación psicológica modificó y relaboró para sus finalidades específicas. De hecho quise que en este diccionario la psicología
no expusiera sólo la belleza de sus ramas sino también la profundidad de sus raíces, que se hunden en el terreno de la filosofía del cual nació la psicología y de donde con frecuencia todavía incluso, sin saberlo, continúa nutriéndose, para extenderse hacia las disciplinas afines que son la epistemología, por lo que se refiere a la justificación de los asuntos teóricos mismos; la fenomenología, por la modalidad de conducir la observación más allá de la división entre alma y cuerpo; la antropología cultural, por los modelos de investigación que ésta elaboró y transformó a partir de la psicología; la sociología, que tiene numerosas zonas limítrofes y continuos intercambios de informaciones teóricas y experimentales con la psicología; la pedagogía, a la que la psicología ofrece modelos interpretativos esenciales y de la que recibe respuestas significativas de acuerdo con la comprobación empírica; la lingüística, porque el lenguaje es el horizonte donde la psique se expresa, se narra, rinde cuentas; la hermenéutica, porque la palabra no existe más que en la huella de la interpretación histórico-cultural, de la cual la psicología no está aislada.
Junto a las ciencias humanas, las ciencias biológicas son para la psicología términos de referencia esenciales, como en el caso de la genética, cuyos rápidos desarrollos determinaron, si no el desplome, seguramente sí la sacudida de numerosas hipótesis culturales; la endocrinología, cuyos descubrimientos, lejos de haberse agotado, no dejan de desplazar el eje de referencia de la descripción psicológica del plano de la hipótesis interpretativa al de la comprobación experimental; la neurofisiología, hoy enriquecida por las importantes contribuciones provenientes de la clínica psiquiátrica, la farmacología, la neurocirugía e incluso la etología, que recientemente se emancipó de la psicología animal genérica. Por último, no faltan las contribuciones provenientes de la estadística, la cibernética y el estudio de los tests, que permiten traducir datos iniciales en datos elaborados y disponibles para hipótesis teóricas sostenidas con la confirmación experimental.
Autor
Galimberti, Umberto
Fuente
www.ebiblioteca.org
Editor
Siglo Veintiuno Editores
Fecha
1a ed.; 2002
Idioma
Español
Identificador
Psicología, Psicopedagogía, Psiquiatría, Diccionarios, Enciclopedias, Consulta, General
Colección
Citación
Galimberti, Umberto, “Diccionario de Psicología,” Biblioteca Virtual, consulta 21 de noviembre de 2024, https://biblioteca-digital.universidadcolumbia.edu.mx/items/show/917.